«Nos preguntamos: ¿Ha habido muestras de arrepentimiento de parte de quienes planificaron y realizaron la desaparición forzada de personas? ¿Han pedido perdón, estos representantes e instrumentos de la Doctrina de la Seguridad Nacional, a las víctimas, a sus familiares, a la sociedad entera? Leemos en el Documento de Puebla: «asesinatos, desapariciones, prisiones arbitrarias, actos de terrorismo, secuestros, torturas continentalmente extendidas, demuestran un total irrespeto por la dignidad de la persona humana. Algunas pretenden justificarse incluso como exigencias de la seguridad nacional» (N°1262).

«Es de esperar que la lectura serena de estas páginas motive a los bien intencionados (que entendemos han de ser los más) para que pasen de la nueva información objetiva a una decidida acción pacífica a fin de que ningún hogar argentino y latinoamericano vea en el futuro amenazada su paz y su integridad.»

Jorge Novak
Obispo de Quilmes
(Quilmes, 6 de agosto de 1989, 44° aniversario del bombardeo atómico a Hiroshima.)