¿De dónde viene la palabra ‘adefesio’?
¿Por qué los hablantes admitieron en su momento ‘infanta’ pero no hemos aceptado ‘jóvena’?
Si ‘patético’ es griego equivalía a ‘impresionante’, ¿por qué ha pasado a significar ‘penoso´?

La palabras encierran una curiosa historia que narra su viaje en el tiempo y en el espacio, y nuestra lengua es especialmente rica en historias de palabras. El español está lleno de préstamos del latín, el griego, el árabe, el vasco, el francés o el inglés, que se han adaptado en su forma y muchas veces también en su significado.
El léxico es un volcán que está en constante ebullición y su continua renovación se debe a infinidad de causas: evoluciona la mentalidad del hablante, sus circumstancias, sus costumbres y modas; las formas vulgares alternan y conviven con las cultas; se crean nuevas palabras, ya sea por interpretación equivocada o de manera deliberada, cuyo éxito dependerá de la aceptación que tengan entre los hablantes.

300 historias de palabras está dedicado a relatar de manera sencilla y amena algunos de los lances y avatares que han sufrido las palabras con 300 ejemplos curiosos y soprendentes.