Fray Luis de León nació en Belmonte de la Mancha, en agosto de 1527, y murió en Madrigal de las Altas Torres, el 23 de agosto de 1591. A los 16 años ingreso, al parecer por vocaicón, en la Orden de los agustinos, en Salamanca, ciudad en la que estudió, enseño y realizó la mayor parte de su actividad intelectual. Por su dominio del griego, el latin, el hebreo y el arameo, por su extraordinaria erudición literaria, filosófica y teológica, y, en fin, porque su sincera devoción religiosa, no le impidió tener una actitud independiente y un espíritu libre de prejuicios, puede decirse que Fray Luis, además de un genio de las letras, es el máximo representante español de la cultura del Renacimiento y el único que, por el impecable equilibrio entre la hondura del pensamiento y la perfección formal, merece ser llamado verdaderamente clássico.